LMA 4

LMA 4
Una nueva batalla se acerca, el conocimiento de una antigua profecía que amenaza con acabar su mundo tal y como lo conocen, sumada a un antiguo legado de poder, son los protagonistas de esta nueva historia… acompáñenme a descubrir cómo harán frente nuestros valientes Arzhaelíes a esta nueva aventura con la ayuda de... Los Cinco Elementos

jueves, 20 de noviembre de 2014

Cap. 09 Los Elegidos (II)…



Samantha había pasado los dos últimos días con una extraña sensación de pesar. Aquella noche después de dar las buenas noches a los niños, se había ido a acostar pero no tenía nada de sueño. En la madrugada cerró los ojos intentado buscar el evasivo sueño, pero esto fue aun peor, porque en forma inadvertida su mente fue invadida por unas imágenes que la sobresaltaron. Se vio en una estancia con Kenny y él la estaba besando, pero lo que causó su asombro fue que ella le correspondía con entusiasmo. Se incorporó en la cama de forma violenta asustando a Giulian.

-          ¿Princesa, estás bien?

-          Sí amor, lo siento solo fue un mal sueño  --  le dijo

-          Ven aquí

Ella se dejó abrazar pero mientras escuchaba la lenta respiración de Giulian, su mente buscó una explicación a lo que acababa de suceder, hasta que finalmente llegó a la conclusión de que por alguna extraña razón, había invadido los sueños de Kenny, pero lo que más la preocupó no fue haberlo hecho, sino que él tuviese esa clase de sueños. En algún momento previo al amanecer se quedó dormida, pero aunque Giulian intentó no despertarla al levantarse, igual ella despertó.

A la hora del desayuno, tanto sus padres como Iván, Elar y Giulian, la miraban con preocupación, y después del mismo, Giulian arrastró a Dan al estudio.

-          ¡Esto es culpa tuya infeliz!  --  le gritó

-          Giulian…

-          ¡Mira cómo está!  --  siguió él sin prestarle atención  --  ¡Apenas si come, y casi no duerme!

-          Giulian estás siendo muy injusto  --  escucharon la voz de Iván a sus espaldas

-          ¿Injusto?  --  vociferó

-          Sí, y te sugiero bajar la voz si no quieres que todo el Castillo se entere

-          ¡Al demonio con eso! Todo este asunto de la profecía la está matando, y ustedes parecen no notarlo

Sin embargo, y aunque Iván y Dan se preparaban para tranquilizar al furioso individuo, en ese momento un Nisser le anunció a Giulian la visita de Eowaz, para extrañeza de los tres Arzhaelíes que se apresuraron hacia el salón principal.

-          Señor  --  saludaron los tres

-          Buenos días, lamento venir sin avisar y espero no interrumpir nada

-          Por supuesto que no  --  dijo Iván

-          ¿Sucede algo señor?  --   preguntó Dan que registraba frenéticamente su cabeza buscando un motivo para aquella inesperada visita

-          En realidad con quien me gustaría hablar es con Samantha, pero me pareció más prudente avisarte primero  --  dijo mirando a Giulian

Aquello le gustó aun menos a Giulian, que al igual que Dan buscaba una razón válida para que Eowaz estuviese allí y no lo hubiese citado a la Sede. Y siendo que aun estaba de muy mal humor, este fue evidente en su pregunta.

-          ¿Y para qué exactamente?

-          Es con relación a la profecía y a…  --  pero Giulian no lo dejó terminar

-          ¡Esto es el colmo!  --  explotó  --  ¡También usted!

-          ¡Giulian!  --  exclamaron Iván y Dan horrorizados, pero Eowaz levantó una mano ordenándoles silencio y se acercó a Giulian

-          Giulian entiendo cómo te sientes

-          ¿De veras?  --  preguntó él en forma irónica

-          Sí, la amas y estás preocupado, pero piensa un poco ¿Crees que si no tuviese la capacidad, el poder y la habilidad para hacer esto, la habrían escogido a ella?

-          ¿Y alguien ha pensado en lo que va a enfrentar? ¿Alguien tiene una mínima idea de lo que es? ¿Alguien se ha detenido a pensar en cómo se siente ella? ¿Alguien ha pensado en que las cosas podrían salir mal, y resultar muy lastimada o…  --  pero las últimas palabras se habían negado a salir de su garganta

-          Créeme que lo hemos pensado, pero al menos yo confío en que todo saldrá bien, y todos y cada uno de los elegidos para acompañarla en esta difícil tarea, está dispuesto a protegerla con su vida  --  hizo una pausa y colocó sus manos sobre los hombros del Arzhaelí  --  Ten confianza Giulian, si perdemos la esperanza, ya podemos darlo todo por perdido.

Después de un rato Giulian pareció tranquilizarse y mandaron a llamar a Sam. Sin embargo, la escasa tranquilidad alcanzada por Giulian, fue sustituida por otro sentimiento igualmente tormentoso más tarde.

-          Buenos días señor  --  saludó Sam en cuanto entró

-          Buenos días Samantha  --  contestó Eowaz  --  Vine porque en la pasada ocasión cuando conversamos, me hiciste una pregunta  --  ella lo miró sin comprender y él agregó  --  Me preguntaste si debías hablar con aquellos que habían estado soñando contigo. En esa oportunidad te dije que debías esperar, pero creo que ha llegado el momento de que te reúnas con ellos.

-          ¿Por qué?

-          Porque han recibido la visita de los elementales, y creo que es momento de que conversen.

-          ¿Señor, ya tiene una idea de por qué fueron escogidos?

-          Como sabes, yo no tengo ningún contacto con esos seres, de modo que solo puedo suponer que han sido elegidos por el especial lazo de afecto que los une a ti y por sus cualidades, naturalmente  --  pero Sam arrugó el entrecejo

-          Podría estar de acuerdo en el caso de mi familia y mis amigos, pero en el caso de Garlan y Armel, eso no me parece muy probable.

-          Estas viendo las cosas de forma injusta en un caso, y equivocada en el otro  --  le dijo él

-          No entiendo.

-          Garlan McEwan no se caracteriza por su simpatía, y es algo que todos sabemos. Sin embargo, ha dejado claro en más de una ocasión lo mucho que le importas, y para más añadidura, acepto ser el padrino de una de tus hijas, lo que es una muestra clara de ese afecto.

Eowaz era uno de los individuos que Iván más admiraba y respetaba, y siempre había pensado que sus decisiones y sus palabras eran las más sensatas y acertadas, pero en esta ocasión, pensó que había cometido un terrible error al decir lo que estaba diciendo en presencia de Giulian, que en aquel momento tenía una expresión tormentosa. Sin embargo, Eowaz no le estaba prestando atención y continuó su conversación con Sam.

-          Y en el caso de Armel Haider, aunque no exhibe el mismo humor negro de Garlan ni su proverbial antipatía, tampoco es especialmente dado a demostrar sus sentimientos. Es un sujeto cuya frialdad y discreción, puede inducir al error de creer que es del todo indiferente no siendo así. Desde que tuvo la tarea de instruirte, desarrolló un gran interés y me atrevería a decir sin temor a equivocarme que también un gran afecto por ti

Samantha no podía estar más asombrada, porque si bien era cierto que su relación con Armel no difería en mucho de la que tenía con la mayoría de los Arzhaelíes a los que conocía, durante su entrenamiento siempre le pareció que él no se mostraba especialmente satisfecho con sus avances, y aunque no llegaba a los niveles de hostigamiento exhibidos por Garlan, ella estaba en la creencia de que la consideraba poco apta, y en ningún caso habría pensado que podía profesarle algún afecto. No obstante, no discutió con Eowaz y se mostró de acuerdo en reunirse con todos los involucrados. Pero cuando subió a su habitación, sacó cuentas de nuevo y seguía faltándole uno, porque aunque no había hablado con Mael, ella estaba segura que formaba parte del grupo, no podía ser de otra manera, pero aun así seguía faltando uno.

Fiel a su palabra, Sam invitó a todos los Arzhaelíes a cenar aquella noche, pero sabía que como de costumbre tendría problemas con Garlan, de modo que cuando Alaric había ido a ver a las trillizas aquella tarde, le pidió que se hiciese cargo de traerlo.

Poco antes de la mencionada cena, Iván acorraló a Giulian que había estado de un humor negro durante todo el día.

-          Déjame en paz Natchzhrer  --  dijo cuando Iván lo detuvo

-          No, y vas a escucharme aunque tenga que emplear la fuerza para ello  --  lo amenazó

-          ¿Qué demonios quieres?

-          Solo pedirte que por favor te comportes. Sé que amas a Sam, pero entiende que ella te ama a ti y con tu actitud solo le causas pena y dolor.

-          No he hecho una maldita cosa

-          Aun no, pero te pido que no lo hagas tampoco

Lo soltó en cuanto sintió que Samantha se acercaba, y los tres se encaminaron hacia el salón. Los últimos en llegar fueron Alaric y Garlan, y por supuesto él segundo venía protestando en todos los tonos. Sin embargo, cesó en los insultos a Alaric y se entretuvo con Gemdariel, mientras los gemelos intentaban hacerle toda clase de maldades ante la mirada complacida de su padre. Una vez que los niños fueron llevados a sus habitaciones, ellos pasaron al comedor.

-          Si los he reunido hoy es para conversar acerca de las visitas que han recibido  --  les dijo Sam

En ese momento las miradas se concentraron en Garlan y Armel, porque los demás ya habían conversado mucho acerca del asunto y sabían qué elementales los habían visitado, pero con respecto a ellos dos, no  sabían nada. De modo que Armel fue el primero que habló y les dijo que había sido visitado por Aine¸ esto no extrañó a nadie ya que dada su habilidad en el plano de lo psíquico, era lo más lógico. Y en el caso de Garlan, tampoco resultó una sorpresa que hubiese recibido la visita de Liminíades, ya que aquel individuo era tan volátil como Dan y Giulian, razón por la cual siempre andaban enfrentados.

Ambos les dijeron que después de aceptar acompañar a los elementales a su dimensión y haber recibido la instrucción correspondiente, habían sido conducidos ante los señores del elemento de cada uno, donde les habían explicado en qué consistía la misión a enfrentar, y por último les habían dicho que estaban en libertad de negarse, pero que si aceptaban, era un pacto que los mantendría unidos de por vida, independientemente del resultado de la empresa, no solo a Samantha, sino a todos los involucrados en ella. Y como ya sabían, ambos habían aceptado el compromiso.

-          Gracias  --  dijo Sam  --  Al margen de las razones que hayan tenido para aceptar, se los agradezco enormemente

-          Soy un Arzhaelí y solo cumplo con el juramento que hice  --  dijo Armel  --  De modo que no tienes nada que agradecer señorita Douglas.

-          Cornwall si no te molesta  --  dijo Giulian con acidez

-          De cualquier forma, estoy igualmente agradecida Armel  --  dijo ella y miró a Garlan

-          A mí no me agradezcas nada Niña, tienes la odiosa manía de meterte en demasiados líos y alguien debe ver que conserves tu tonta cabeza en su sitio  --  dijo con su habitual mal humor y ella solo sonrió sin agregar nada para no incomodarlo más

Sin embargo, la incomodidad era algo generalizado en aquella inusual reunión. Por descontado la de Giulian era la más obvia, seguida muy de cerca por la de Jonathan, que por algún estúpido motivo seguía sintiendo unos celos salvajes por causa de Armel, de manera que cuando lo veía cerca de su mujer, su proverbial buen humor y su alegre sonrisa se iban a paseo. Y la otra que no estaba nada contenta era Anastasia. Kenny casi había tenido que amenazarla para asistir a la cena y no porque tuviese especial interés en llevarla, sino porque se le estaban acabando las excusas  para sus constantes ausencias.

Una vez finalizada la cena, pasaron al salón y Sam estaba por acercarse a Giulian con la intención de quitarle el vaso que tenía en las manos, porque a su juicio ya había bebido suficiente, cuando vio aparecer a uno de los Nisser del Castillo y dirigirse discretamente a su marido,  acto seguido las cejas de Giulian se juntaron en un gesto de evidente disgusto, haciendo que Sam se preguntase qué sucedía ahora.

-          El otro McKenzie pide hablar contigo señora Cornwall --  le dijo en forma fría, y ella se sorprendió tanto por el tono como por la información

-          ¿Will?  --  preguntó con asombro

-          A menos que conozcas a otro que yo no, se trata de ese, y me harías un gran favor si dejases de ser tan popular entre la población masculina, o terminaré en Fangelsi por tu causa

Aunque Iván estaba al otro lado del salón, no tuvo ninguna dificultad para escuchar el intercambio,  y sintió verdaderos deseos de golpear a Giulian, y de forma automática pensó que aquel infeliz tenía mucha suerte de que Mael no estuviese presente, porque estaba seguro que él no se habría mostrado tan paciente con la forma como estaba tratando a Samantha. Sin embargo, Sam no pareció prestar mayor atención al comportamiento hostil de su marido, sino que le dio la espalda y salió del salón. Mientras se encaminaba hacia el salón donde se encontraba el Dver, iba pensando en lo extraño de esa visita porque Will no se había vuelto a acercar a ella nunca más, no asistía a ninguna de las cenas de los sábados ni a ninguna otra reunión que efectuasen, y ni siquiera iba a los cumpleaños de sus sobrinos. La última vez que recordaba haberlo visto, había sido en la presentación y bautizo de Lyseryd, y eso sin duda porque era su padrino. Pero del mismo modo mientras caminaba, una certeza penetró su mente. Will era el otro elegido.

-          Will, qué sorpresa  -- dijo al entrar

-          ¿De veras?  --  preguntó él

-          Pues ciertamente no te esperaba, pero me alegra verte

-          No te quitaré mucho tiempo porque presumo que sabes lo que me ha traído, de modo que solo tienes que decirme dónde y cuando, y allí estaré

-          Te lo agradezco Will

-          Bien, como eso era todo, me marcho

-          Espera  -- lo detuvo y él se volvió elevando una ceja

-          ¿Si?

-          ¿Puedo saber qué elemental se puso en contacto contigo?

-          Una vieja amiga, Liminíades  --  Sam se extrañó ante la calificación de vieja amiga  --  ¿Algo más?

-          No… es decir solo… gracias

-          Eso ya lo dijiste  --  dijo él con su sequedad característica  --  Adiós Samantha

Y antes de que ella pudiese articular ninguna otra cosa ya él había entrado al Dver, de manera que Sam se encaminó de nuevo hacia donde estaban los demás, que informados por Iván de la inesperada visita de Will, la miraron con curiosidad en cuanto entró.

-          Will es el otro elegido  --  dijo ella contestando a la pregunta no hecha

La noticia generó distintos niveles de asombro, y casi nadie se lo tomó muy bien, con la posible excepción de los McKenzie, aunque esto excluía a Kenny. Amy y Dan, conocían en realidad poco a Will McKenzie, al igual que Daira a pesar de que era su cuñado, y Elar no lo conocía en lo absoluto ya que lo había visto en poquísimas ocasiones y nunca había hablado con él. Garlan, Alaric y Armel, se preguntaban por qué aquel individuo habría sido escogido para algo como aquello, si no tenía formación alguna. Danny y Gail no habían olvidado que Will había estado comprometido con Sam por un breve lapso de tiempo, y de los McKenzie era el que menos les agradaba. Iván sabía que ese compromiso había sido ficticio, y que había sido lo único que se le había ocurrido a Sam para no decir que a quien amaba era a Giulian. Pero de todos los McKenzie, quien conocía mejor a Will era Jonathan, y sabía positivamente que su hermano amaba a Samantha, y esa era una de las razones, sin duda alguna por la que había sido elegido para aquello, aparte del hecho poco conocido de su especial poder con el fuego. Y en el caso de Giulian, la imagen de Will besando a Sam aquel lejano día en la terraza, y que tanto lo había torturado en aquel entonces sin saber por qué, estaba grabada a fuego en su memoria, y esta noticia lo que hizo fue aumentar en forma considerable su consumo de alcohol.

No obstante, no hubo mucho tiempo para discutir ni para hacer preguntas, porque unos minutos después y cuando Giulian estaba a punto de servirse otro trago, Samantha repentinamente ahogó un grito y se llevó la mano al pecho. Giulian dejó caer vaso y botella y corrió hacia ella, pero cuando todos se estaban preguntando qué había sucedido, Diandra, Aderyn, Danny y Gail palidecieron. Gail y Danny corrieron hacia Sam y apartaron sin ceremonias a Giulian arrodillándose a su lado.

-          ¿Sam dónde?  --  preguntó Danny, pero ella estaba llorando en forma convulsiva

-          ¡Sam!  --  exclamó Gail sacudiéndola por los hombros

Nadie entendía qué estaba sucediendo y Giulian estaba a punto de apartar a Gail, cuando Sam logró hablar.
-          No lo sé… es… --  pero cerró los ojos

-          ¿Qué sucede?  --  preguntó Dan preocupado

-          … una montaña y… está herido

-          Mael  --  dijo al mismo tiempo Iván con cara de horror

-          ¿Berserker?  --  preguntaron Garlan y Armel

Pero al tiempo que decían eso, tanto Armel como Iván se acercaron a Sam, apartando a Danny y a Gail.

-          Linda  -- dijo Iván arrodillándose frente a ella  --  intenta concentrarte en lo que estás viendo

-          No sé… está herido…  -  seguía diciendo ella

-          Vamos Samantha  --  dijo Armel  --  concéntrate, si tú lo ves nosotros lo veremos

Sam cerró los ojos de nuevo y Armel le colocó las manos en la cabeza,  Iván como no necesitaba hacer eso, solo estuvo atento. Unos segundos después Armel separó las manos, miró a Iván y este asintió.

-          McEwan  --  llamó Armel y él se acercó  --  Presta atención e identifica el lugar  --  y luego de recibir las imágenes de Iván y Armel…

-          Noruega, pero puede ser Galdhøpiggen o Knutholdstinden, porque…

-          Knutholdstinden  --  lo interrumpió Jonathan  --  y tengo una idea aproximada, pero debemos darnos prisa

-          Es una zona de Uzkys  --  dijo Alaric ante la mirada interrogativa de todos


Las chicas ahogaron un grito, mientras los Arzhaelíes corrían hacia la puerta, pero ya Sam había desaparecido sin detenerse a pensar para horror de Giulian, pero como no había tiempo que perder, Iván lo sujetó y lo arrastró con él.

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